EN MEMORIA DEL LOCUTOR RADIAL Y ANIMADOR FESTIVALERO MIGUEL ANGEL FERNÁNDEZ

19.07.2012        09:00         CORRIENTES                                                                               Del Archivo del Director

Por: Angel Mántaras Márquez

Con la Embajada de la Flor recorrió pueblos y cosecho anécdotas junto a importantes figuras del cancionero popular correntino. Al mismo tiempo iba creciendo su prestigio como presentador de Festivales, sin descuidar su profesión de locutor.

Dueño de una voz potente y buena figura su fama al frente de Festivales fue creciendo, y entonces le toco conducir importantes Festivales provinciales y nacionales.

Fue empresario de la radiodifusión cuando instaló en una FM en Goya, y años más tarde se ganó un espacio importante en el mediodía de la radiodifusión con su programa en LT Radio Corrientes, la Gigante de la región, tal la frase que el mismo creara.

“La radio mágica”, tuvo su versión también en internet, difundiendo al mundo temas diversos que él trataba en su programa.

Llego el tiempo de hacer un programa en Canal 13, que rápidamente se convirtió en un clásico para la teleplatea de la ciudad, y tenia otros proyectos que encarar, cuando le llegó la muerte.

Los Festivales del Gladiolo y la Flor, los Carnavales Regionales y las Fiestas Patronales en Santa Rosa, lo contaron como el conductor oficial algunos años hasta las últimas ediciones.

En muchos Pueblos del interior lo convocaban todos los años para animar sus principales Fiestas y era un hombre que conocía muy bien la idiosincrasia de cada paraje, colonia, pueblo y ciudad donde le tocara ser la voz de la celebración. Conocía nombres, apellidos, sobrenombres y anécdotas de los habitantes destacados de esos lugares, y esa condición le daba el placet especial de los espectadores.

Provenía de una familia de hermanos locutores y un poeta. Gente ligada al quehacer de la radiofonía y con buena relación con todos.

En lo últimos tiempos fue victima de la inseguridad que vive la ciudad, cuando le arrebataron su maletín en el barrio donde tenia su residencia. A partir de ese hecho su salud desmejoró, y comenzaron las complicaciones.

Fue un hombre que dedicó su vida a su profesión de locutor y conductor de Festivales, y a su familia. Su esposa, lo acompañaba a muchos pueblos y ciudades del interior, y los dos conformaban un matrimonio ejemplar.

Esta pérdida, es pérdida de los que quedamos con vida, porque se nos va un ser querido, y ya nunca más podremos disfrutar ni de su presencia y de la charla amena. La gran pérdida es para nosotros, huérfanos de tan grata compañía.

 Miguel Àngel, seguro estoy de tu merecido descanso eterno.

...